martes, 28 de septiembre de 2010

La Concha conquista nuevamente el corazón de Santiago.

El viaje comenzó a las 6 de la mañana del pasado domingo día 26 de Septiembre cuando salíamos de la Ciudad Deportiva, en Zamora 11 autobuses camino de Santiago de Compostela al encuentro con el Santo en este año Xacobeo y al encuentro de nuestra Patrona, la Virgen de la Concha. A eso de las 11 y cuarto del mediodía cuando mi autobús, el "3" exactamente, llegaba a la estación de Santiago de Compostela dejábamos tras de sí 5 horas de carretera y una parada obligatoria más o menos a la altura de Sanabria por una pequeña avería que rápidamente subsanaron los efectivos de Protección Civil, el conductor de nuestro autobús y el conductor del Autobús número "4".
Llegados a Santiago, mi amigo Oscar y yo salimos corriendo en medio de la gente que por allí se encontraba para llegar cuanto antes a la procesión que tenía como hora de salida las 11 de la mañana y por aquel momento eran pasadas. Sin aliento cruzábamos calles y llegando a la Plaza del Obradoiro preguntamos a unos policías por la Iglesia del Pilar, lugar de salida de nuestra Patrona. Corriendo de nuevo por la calle que nos dijeron llegamos a un parque donde antes de entrar se oían las notas del himno de la Concha y que rápidamente reconocimos los dos. Nos miramos con la sonrisa en los labios y la emoción en los ojos y cruzamos rápidamente la calle que nos separaba de aquel parque donde nos encontramos de frente un grupo de mujeres ataviadas con trajes típicos zamoranos y estandartes y banderas de Zamora en las manos. Alzamos la mirada y a lo lejos, entre los árboles venía la Concha, bella, elegante como una Reina, tocada con manto rojo como la bandera de su ciudad y en su mano, como siempre, la cadena con la que lleva atado al Niño. El corazón nos dio un giro. Fue un momento de emociones fuertes muy seguidas: nuestra gente, algunos familiares nuestros, gente de nuestros pueblos, de nuestra Zamora, cientos y cientos de devotos en medio de la música tradicional nuestra y con nuestra Patrona sobre las cabezas como caminando sobre "los suyos" y entre árboles como si de Valorio se tratase. Nos unimos a la procesión-romería y entre saludos, alegrías y gritos de 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, .... Cooooonchaa fuimos hasta la catedral. Los vecinos de Santiago y demás turistas nos aplaudian al paso y nos gritaban "VIVA ZAMORA" "VIVA LA VIRGEN DE LA CONCHA". Hicimos la entrada en el templo por la puerta de Platerías y a los sones del Himno de España la Virgen entró en el interior. Allí nos encontramos cientos y cientos de personas unos enfermos, otros peregrinos y otros devotos del Santo Apostol, patrón de España, que esperaban ya la Misa de Peregrinos y tras colocar la Virgen en su lugar apropiado dio comienzo la Eucaristía. La celebración fue presidida por el Obispo de Santiago y el Obispo de Zamora que pidieron al Apóstol por nuestra Ciudad, por los jóvenes de ella y por todos los reunidos allí entorno a su sepulcro, que habíamos asistido con fe y esperando los favores pedidos.
Terminada la celebración salimos a la explanada de la Catedral donde con música tradicional zamorana y bailes se terminó de amenizar la mañana tanto para nosotros como para los asistentes a la ciudad de Santiago en ese día y que por allí paraban.
A continuación fuimos a comer y tras la comida nos dirigimos a la cola que había de más de una hora para entrar de nuevo en la Catedral, pero esta vez por la Puerta Santa para darle el tradicional abrazo a la Santa imagen de Santiago. Al encontrarme tras de Él y apoyar mis manos en sus hombros y mi boca sobre su cabeza le susurré unas palabras por mi, por los que fuimos y los que no pudieron ir y por nuestra ciudad.. Salí de allí y bajamos al Sepulcro donde como en veces anteriores me postré ante la arqueta que guarda sus restos.
Cuando abandonamos el templo paseamos por Santiago tomando algo y visitando tiendas a la vez que charlábamos con nuestros paisanos y bailábamos a los sones de nuestra música.
A las 5 y media de la tarde teníamos el encuentro nuevamente con la Concha para regresar al templo del Pilar, de donde salio por la mañana. En ese traslado tuve ocasión de llevarla unos metros sobre mis hombros. Unos la jaleaban con piropos, otros con vivas y yo con un Ave María y unas palabras de agradecimiento por dejarme llevarla sobre mi. En esos momentos se me volvieron a mezclar en la cabeza las emociones de la mañana. Allí estaba yo, con mi gente, oyendo mi música tradicional (exactamente el himno de la Concha), ovaciones a la patrona y lo más grande: llevarla a Ella sobre mis hombros, la JEFA de mi ciudad. Como anécdota, cuando pasaba cargando junto a un grupillo de gente que nos veían pasar bajo unos soportales una chica, cuya cara casi no recuerdo, me puso una mano en el hombro libre y me dijo: ¡ánimo para el 2021, Viva Zamora y vuestra patrona!. Esas palabras me llegaron muy hondo. Eran palabras salidas de la boca de alguien no zamorana admirada por lo nuestro y eso a mi forma de ver es para quitarse el sombrero.
Llegamos al templo del Pilar y tras el cántico de la Salve popular nos despedimos de Ella y de los amigos allí reunidos deseándonos “un buen regreso a nuestra tierra”. Con ello poníamos fin a un hermoso día que siempre recordaremos en nuestra mente.
Saludos.
Horacio (Razieddu)



Foto: Horacio Navas Juan (Razieddu)

lunes, 13 de septiembre de 2010

14 de Septiembre, Día del Cristo, pero sin el Cristo.

Hay días importantes en la vida de cada uno: el cumpleaños, el santo, el día de la boda, …… y para mí el 14 de Septiembre es una fecha clave en mi calendario personal por tratarse del día de la Exaltación de la Santa Cruz, o mejor dicho para mí y mis paisanos: “el día del Cristo”. Bien, son las 5 y media de la mañana y tras un largo tiempo de dar mil vueltas en la cama sin poder pegar ojo he tenido que levantarme a escribir estas lineas porque no puedo dormir pensando en el día que es y yo a más de 100km de Moraleja sin poder estar allí. Mi primera vez en la vida que tal día como hoy no piso ese dichoso suelo de la comarca de Sayago que es mi pueblo, la primera vez en mi vida que no podré asistir a la Eucaristía en su Honor allí, pero sobre todo la primera vez en la vida que no podré caminar a las 6 de la tarde junto al Hijo de Dios clavado en la cruz bajo el hermoso título de la Paz ni llevarlo sobre mis hombros como desde hace años que cargo con su hermosa imagen a la vez que le pido, cuando cargo, por todos los que lo quieren y me quieren y necesitan de su ayuda. Como decía antes, cada uno tiene en su calendario personal días claves e importantes que le gusta recordar y celebrar año tras año y para mí el 14 de Septiembre, ha sido, es y será uno de los días más importantes del año junto con el Sábado Santo. El Cristo de la Paz, quien me conoce bien sabe lo que significa para mí y aunque no ha terminado el año 2010, no creo que en estos tres meses y medio que resta para empezar el nuevo año haya un día más cruel para mi que hoy. Hoy a las 9 y media asistiré a misa en su Honor en la iglesia de Santa María y desde allí le enviaré mi oración hasta Moraleja, que sin duda la escuchará y tras ello, como de costumbre, me iré a trabajar intentando llevar el día lo más tranquilo posible, intentando pensar en otras cosas para autoengañarme (aunque no será posible en general y menos las horas claves como la una del mediodía y las seis de la tarde). Pero la vida da mil tumbos y hay veces cálices que nos toca beber y como nos dice Él: toma tu Cruz y sígueme.

En fin, no quiero alargarme más, solo quería plasmar por escrito mi inquietud personal como hago siempre. Para terminar quiero dedicarle unas lineas al Señor de Moraleja, a mi Cristo de los Cristos, a mi Cristo de la Paz:

Querido Cristo de la Paz, Tú que lo sabes todo, sabes mi situación personal y sabes lo que daría por estar a tu lado, pero sabes a la vez que esta vez no puede ser. Cuando te saquen esta tarde a hombros por las calles de mi pueblo, de tu pueblo, bendícelos a todos y bendíceme a mí desde allí, que a las seis de la tarde estaré pensando en ti. Derrama sobre todos nosotros un año más tu hermoso título de la Paz, que tanta falta hace en este mundo, para que nosotros, Hijos tuyos, sepamos como lo hiciste y haces Tú, poner Paz donde veamos guerras, unión donde veamos distancias y amor donde veamos odio. Ayuda a los que necesitan de tu generosa mano, tanto a los enfermos, parados, …. y en estos momentos de crisis por los que está pasando el país danos aliento suficiente para superar las barreras que la vida nos pone en el camino diariamente.

Que el año que viene pueda estar cerca de ti como lo he estado siempre. Te quiero.

Un saludo

Horacio (Razieddu)




martes, 7 de septiembre de 2010

Real Sitio de la Granja de San Ildefonso

Hola a todos, tras un tiempecito de estar "apartado" de aquí por motivos veraniegos y personales vuelvo con una entrada dedicada a un lugar que merece la pena visitar al menos una vez en la vida: Las fuentes monumentales de la Granja de San Ildefonso, Segovia. El pasado 25 de Agosto tuve la ocasión de poder disfrutarlas, verlas "tranquilamente" y como no, fotografiarlas, aunque no tanto como hubiese querido, pero ya se sabe que el tiempo va siempre en contra en estos casos. Por la mañana pasé recorriendo las angostas calles de la capital, Segovia, visitando sus principales monumentos: Acueducto, Alcazar, Casa de los picos, paraje de la Sierra de la Mujer Muerta, ....... y una serie de iglesias que nos encontrábamos a nuestro paso. A las 11 había quedado en las puertas del Alcazar con un buen amigo Jerezano, pero afincado en Segovia, que nos iba a servir de Cicerón para enseñarnos más a fondo la ciudad y posteriormente la gastronomía. Primero entramos en el Alcazar y tras visitar toda la fortaleza nos dirijimos a la Torre del Homenaje para desde las alturas y tras recorrer sus 152 escalones poder observar la ciudad y sus alrededores. Finalmente recorrimos la Plaza Mayor, la Catedral,.....etc y llegamos al Acueducto, impresionante obra romana que aún hoy saca un ohhh!!! de las gargantas de quien lo mira con detenimiento. Parece increible, como si fuese "de cartón-piedra" como decíamos alli junto a él, pero no, es de grandes bloques de granito que uno a uno fueron tallados y colocados unos sobre otros para abastecer de agua a la ciudad castellana. Tras dedicarle un paseo a lo largo de su estructura y comentar unas cuantas cosas de él eran las dos de la tarde y el estómago nos pedía comida y a ser posible algo "de la tierra", por lo cual de los tres que estabamos juntos comiendo y a pesar de los 35º de temperatura, yo, no podía pasar por Segovia sin probar "Los Judiones de la Granja" y el "Cochinillo Segoviano", y me lo comí. Los demás al igual que otros clientes comieron ensaladas u otras comidas más frescas para paliar el calor que hacía. Con el estómago lleno de tan ricos manjares y el cansancio de estar toda la mañana caminando nos fuimos poco a poco hacia nuestro principal objetivo del día: las fuentes de la Granja.
Poco tardamos en llegar por la proximidad a la que está de la capital por lo cual aunque la cita de empiece era a las 5 y media pudimos pasear un poco por los jardines y admirar con más detenimiento aquellas maravillas creadas por las manos del hombre. Alas 5 y media comenzaron a salir los primeros chorros al aire de la primera fuente: Neptuno o la Carrera de Caballos. Tras ella, todas las demás, una a una fueron brillando con luz propia con el agua que desprendian junto a los rayos del sol que ampliaba aún más el dorado que las cubría. Cada una era distinta a la anterior, y cada cual no era ni mejor ni peor que otra, simplemente distinta y todas ellas algo admirable. Todas nos deleitaban con su fuerza, con sus estatuas, su simbología, con su agua y muchas de ellas nos hacían partícipes de la fiesta mojándonos un poco. Miles de personas nos agolpábamos entorno a ellas, especialmente los "peñistas" del pueblo de la Granja que desde el primer momento no dudaron en darse un chapuzón. A las 7 y media la última fuente "La Fama" daba por finalizada la ruta monumental de las fuentes en plena fiesta de San Luis y con su enorme chorro de 30 metros, que se divisa segun los lugareños, desde la capital nos decía adios. Tras ella nos habiamos asombrado con "Los baños de Diana", "Las Canastillas", "Las Ranas", "Las Ocho Calles", ... En fin, algo que siempre tendré en mi mente y que siempre me gustará volver a ver. Al anochecer regresamos a Segovia donde volvimos a recorrer algunos de los monumentos que vimos por la mañana para admirarlos nuevamente iluminados y si bellos eras a la luz del sol, esa belleza se aumentaba a la luz de los focos donde el Alcazar parecía el verdadero castillo de Disney en medio del cielo negro y el Acueducto una fila de arcos puesta como fichas de dominó que parece que de un momento a otro de va a caer. Desde el barrio judio vimos la catedral, como se levantaba dorada y majestuosa sobre los demás edificios como protegiendo bajo sus muros a su querida ciudad de Segovia. Terminamos la noche en unas terrazas acompañados por otros dos amigos que por motivos laborales no pudieron acompañarnos durante el día como lo hizo Sebas. Ellos son Felipe y Fernando, dos chicos estupendos y que a pesar del poco tiempo que teníamos, disfrutamos de su compañía y su acogida igualmente. Tras unas cervecitas nos despedimos dejando ya en el pasado un maravilloso día y prometiendonos en un futuro y no muy lejano un próximo encuentro, pero esta vez en Zamora y con más tiempo.
Para ellos, Sebas, Miguel, Felipe y Fer va dedicada esta entrada. Por ser tan buenos anfitriones y deseando que el proximo encuentro sea como minimo lo mismo de estupendo que este. Prometo volver por vuestra tierra, ya lo sabeis.
Saludos